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Tercera Ruta del Abadiado, crónica y fotos
Tercera Ruta del Abadiado. HISTORIA Y NATURALEZA.30-9-23
La Ruta del Abadiado se consolida tras la gran acogida en las anteriores citas y el sábado 30 de septiembre es la fecha programada para su tercera edición. Organizada por el Ayuntamiento de Loporzano y el Club de Montaña Javieres de Huesca en esta ocasión se ha diseñado una ruta circular con salida y llegada en la localidad de Sipán, para lo cual incluso se ha habilitado la posibilidad de acudir en bus desde Huesca.
Desde las 7:00 h la organización, que también está coordinando y dirigiendo a los vehículos que llegan para estacionar ordenadamente, tiene habilitado junto al salón social de la localidad el puesto para recoger las acreditaciones de las inscripciones, al mismo tiempo que se entrega una bolsa con productos típicos de la zona, -azafrán y aceite de oliva-, así como información de interés turístico. A su vez en el local se ha dispuesto un variado desayuno para todos los participantes.
A las 8:00 h previo a la salida se da una breve explicación e indicaciones del recorrido a realizar por parte de Javier Cruchaga, presidente del Club de Montaña Javieres, también seguidamente Roberto Malumbres, en representación del Ayuntamiento de Loporzano, agradece la participación, y la técnica en representación de la oficina de turismo ofrece las oportunas explicaciones de los puntos de la zona con mayor relevancia. Tras ello comenzamos la caminata, saliendo por el camino hacia el río Guatizalema que cruzamos por el perfectamente conservado puente medieval, dirección a la cercana localidad de Loscertales, que atravesamos pasando delante de su vistosa Iglesia, para continuar por el camino natural de La Hoya hasta llegar a Coscullano, donde se hace una primera parada breve, hay habilitado un puesto de avituallamiento, en este caso de bebida.
Dejamos Coscullano y avanzamos en continua ascensión por tramos de senda y pista al descubierto, con poca sombra para cubrirse del Sol, que ya aprieta, hasta alcanzar en un plano el esconjuradero de la Cruz Blanca. Hasta aquí llevamos 9 km de recorrido, son las 10:40 h, el calor ya es notable, y tenemos allí el segundo avituallamiento, a base de bocadillo de jamón, fruta fresca y variedad de bebidas y refrescos, que a la sombra de las carrascas y algún madroño sienta de maravilla.
Reemprendemos la marcha pasadas las 11, llaneamos por un tramo de pista, alternando claros y sombras, previo a acometer la última rampa que atraviesa un frondoso pinar, para llegar hasta el Tozal del Pipre, donde tenemos a nuestro frente una magnífica vista de la sierra, con los mallos de Ligüerri, el Pico Borón, Los Pepes y la Atalaya de Santa Eulalia, que no perderemos de vista hasta casi el final del recorrido, vigilante de nuestros pasos. Al fondo, debajo de nuestros pies, el Guatizalema embarrancado.
A partir de aqui comenzamos el descenso, seguimo la senda con el indicativo que señaliza 1 hora hasta La Almunia del Romeral. Bajamos, por terreno de canchal zigzagueando, tramos donde se estira el grupo caminando en fila de a uno, sin representar dificultad, obliga a prestar la debida precaución para no resbalar.
Entramos en La Almunia por una zona de pequeños chalets hasta llegar al local social de La Almunia, donde tenemos el último avituallamiento de la jornada, bebida y fruta fresca. Nos reagrupamos y, aprovechando la sombra, hacemos una pequeña parada.
Nos queda la última parte del recorrido, abandonamos la pequeña localidad siguiendo la carretera durante aproximadamente un kilómetro, para desviarnos a nuestra derecha por una pista que baja hacia el río Guatizalema, que debemos de cruzar pasando con cuidado por unas piedras, estratégicamente colocadas el día anterior por miembros del club, que mo evitan que sea imprescindible la ayuda de guías del Club si no se quiere capuzar. Hay quienes prefieren la opción de cruzar el río directamente refrescándose los pies, ya que apenas cubre y es de agradecer el frescor del agua. Una vez superado ese paso, donde el grupo se ha ido disgregando, nos queda un pequeño repecho entre encinas para llanear durante poco más de 2 kilómetros por el paraje de Las Planiellas, que nos conduce de nuevo hasta Sipán donde a partir de las 14:20 h vamos llegando para completar el recorrido de 17,5 kilómetros.
Finalmente, a las 14:45 h, comenzamos a disfrutar todos los participantes de una deliciosa y abundante paella mixta de la mano de Javier Pérez (Pichetas), seguido del requesón de Villa Villera de postre, terminado así con éxito esta nueva edición de la Ruta del Abadiado.
Agradecer al Ayuntamiento de Loporzano, a su concejal Roberto Malumbres, y a la asociación de vecinos de SIPÁN su entrega y colaboración.
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